CIUDAD DE BELICE / GINEBRA (20 de diciembre de 2013) –La Relatora Especial de las Naciones Unidas sobre la Trata de Personas, Joy Ngozi Ezeilo, pidió al Gobierno de Belice proteger y brindar asistencia a las víctimas de la trata y consolidar una cultura de tolerancia cero contra la corrupción y la complicidad de los funcionarios públicos con los traficantes de personas.
“Belice debe evitar la política de inmigración represiva que agrava el fenómeno de la trata de seres humanos y menoscaba los esfuerzos para combatir y prevenir la trata de personas así como la prestación de asistencia integral a las víctimas», dijo Ezeilo al finalizar su visita oficial al país, la primera realizada por un experto independiente designado por el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas.
Belice es un país de destino, de tránsito y, en un grado limitado, también de origen , donde la trata afecta de manera desproporcionada a las mujeres que son traficadas principalmente para la explotación sexual; especialmente mujeres de los vecinos países de Guatemala, El Salvador y Honduras.
También hay un problema cada vez mayor de los crímenes contra los niños, especialmente explotación sexual de las niñas de familias pobres a través del síndrome de ‘Sugar Daddy ‘ y el fenómeno ´fichería´ en bares, donde los hombres pagan un precio más alto para beber con las chicas (‘ ficheras ‘), una práctica identificada como una puerta de entrada a la prostitución.
La Relatora Especial celebró los esfuerzos de Belice por la ratificación de los principales tratados internacionales de derechos humanos así como el Protocolo para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata de Personas, especialmente de mujeres y niños, que requieren la participación de las partes de los Estados para prevenir, combatir y proteger los derechos humanos de las personas que son objeto de trata.
A nivel nacional, Belice también adoptó en 2013 la Ley de prohibición contra la trata de personas, que condujo a la creación del Consejo contra el tráfico de personas. “El Plan de Acción Estratégico 2012-2014 Contra el Tráfico de Personas, que fue desarrollado en cooperación con la OIM, es un paso positivo”, dijo la experta.
Sin embargo, la señora Ezeilo expresó su preocupación por la capacidad y la voluntad de identificar a las personas que han sido víctimas del tráfico de personas así como potenciales víctimas, en especial aquellos en situación migratoria mixta.
«Más preocupante es la rampante e indiscriminada criminalización de los migrantes irregulares por entrar irregularmente a Belice, lo que contribuye a impulsar que el fenómeno de la trata de personas se esconda aún más», enfatizó y señaló que los funcionarios de inmigración rutinariamente procesan y condenan a inmigrantes incluso antes de darles la oportunidad de contar sus historias o de ser identificados como víctimas o posibles víctimas de la trata de personas.
“La práctica de la criminalización de los inmigrantes en situación irregular está en contra de las normas y prácticas internacionales de derechos humanos, especialmente teniendo en cuenta las condiciones inhumanas de detención y la falta de asistencia básica, incluyendo el establecimiento de contactos con las familias, las embajadas y abogados”, señaló la Relatora Especial de la ONU.
La señora Ezeilo llamó especialmente la atención sobre el hecho de que los niños menores de 18 años de edad también son castigados por el incumplimiento de las leyes de inmigración y se mantienen en la cárcel ya que no hay instalaciones separadas para la detención de los inmigrantes irregulares. “Conocí a chicas menores de edad embarazadas que pueden ser víctimas de trata de personas y se encuentran detenidas junto con los adultos”, dijo.
“Estoy más preocupada por los crecientes informes de la prostitución infantil y la explotación sexual de las niñas en la industria del turismo”, señaló la experta.
Al final de su misión de cinco días, la experta en derechos humanos hizo una serie de recomendaciones preliminares, entre ellas:
• Adoptar un programa integral de asistencia a las víctimas, incluida la creación de centros especializados de acogida.
• Hacer frente a las raíces profundas de la trata de personas, incluyendo servicios a personas traficadas.
• Esforzarse por reducir la impunidad de los delitos contra los niños, especialmente la explotación sexual de las niñas.
• Condenar y consolidar una cultura de tolerancia cero contra la corrupción y la complicidad de los funcionarios públicos con los traficantes.
Durante su visita, la señora Ezeilo se reunió con funcionarios del Gobierno de la Ciudad de Belice y Belmopan, incluyendo la oficina del Primer Ministro, el Enviado Especial para las mujeres y los niños, el Ministerio de Relaciones Exteriores, el Presidente del Tribunal Supremo, el Ministerio de Seguridad Nacional, la Policía, el Ministerio de Desarrollo Humano, Transformación Social y Alivio de la Pobreza, el Ministerio de Trabajo, Gobierno local, Inmigración y Servicios Nacionales así como los Ministerios de Salud, Educación y Turismo. También se reunió con el Defensor del Pueblo y el Consejo contra la Trata.
La experta visitó la Prisión KOLBE, donde son detenidos los migrantes indocumentados y las viviendas de las víctimas. También interactuó con los miembros de las organizaciones de la sociedad civil y de víctimas de tráfico de humanos, incluidas víctimas potenciales.